
Todos sabemos por qué se ha cancelado el fin de semana cidiano. Siendo conscientes de los riesgos debemos aceptar esta decisión con esperanza y con responsabilidad. Eso no quiere decir que a esta asociación se le haya perdido un cachito de alma cidiana en las calles de Burgos, que tristemente a principios de octubre estarán vacías.
Pero guardaremos la ilusión como un tesoro para que renazca con mucha más fuerza cuando podamos celebrar estas jornadas de nuevo. Fuimos cidianos, lo somos y lo seremos. Con trajes y en desfile con mascarilla y en la distancia. Mucho ánimo a todos los socios y amigos. Un saludo. La junta directiva.